Mentir en un juicio cuando eres citado como testigo implica obstaculizar el funcionamiento adecuado de la Administración de Justicia, y no sólo eso, sino que una persona puede sufrir, como consecuencia de un testimonio falso, una sentencia injusta.

Por este motivo, el Código Penal recoge el llamado “delito de falso testimonio”, con las siguientes penas:

• prisión de 6 meses a 2 años y

• multa de 3 a 6 meses.

Para que se entienda que el testimonio es falso y, como tal, se ha cometido el delito, hacen falta una serie de condicionantes:

• Debe mentir (faltar a la verdad según dice literalmente la ley) a la hora de declarar lo que sabe y contestar las preguntas que se le formulan.

• Debe hacerlo conscientemente, sin que sea específicamente necesario para entender cometido el delito que tenga intención de beneficiar o perjudicar a alguno de los intervinientes en el proceso.

• También puede cometerse el delito “por omisión”, guardando silencio en su declaración sobre datos conocidos.

La ley recoge además dos supuestos específicos como agravantes :

• cuando el falso testimonio se produce ante un Tribunal Internacional

• cuando es determinante para que recaiga en el proceso una sentencia condenatoria.

En estos dos casos las penas se impondrán en su mitad superior.

En definitiva, mucho cuidado a la hora de plantearse mentir en un juicio a favor de un familiar o amigo, o igualmente en contra de alguien con quien se esté enemistado. Aquí están las consecuencias.

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